El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha celebrado este lunes la «necesaria» aprobación de la primera ley de la reforma judicial y ha tendido la mano a la oposición para seguir negociando con vistas a las futuras fases de la reforma.
«A pesar de todo, amigos míos, seguiremos intentando negociar y llegar a acuerdos», ha afirmado Netanyahu en un discurso a la nación recogido por la prensa israelí. Esta ley es «necesaria» para que el Gobierno pueda seguir gobernando, según el dirigente israelí.
«Este no es el fin de la democracia», ha remachado en referencia a la aprobación este lunes de la ley que limita el ‘criterio de sensatez’ y por tanto las competencias de los tribunales para anular decisiones del Gobierno que consideren que amenazan el sistema democrático.
Netanyahu ha responsabilizado a la oposición de la falta de acuerdo, pero se ha puesto como objetivo lograr un «acuerdo general» con la oposición sobre el resto de la reforma judicial para finales de noviembre.
El mandatario israelí ha aprovechado para realizar un nuevo llamamiento a la unidad y a seguir siendo «hermanos» a pesar de las diferencias de opinión.
Así, ha pedido que las Fuerzas Armadas se mantengan al margen del debate político, en referencia a los recientes anuncios de reservistas de no prestar servicio en protesta por la reforma judicial. «Tenemos una nación, un hogar, un pueblo. En vísperas de Tisha B’Av debemos salvaguardarlos por encima de todo», ha apuntado en referencia al principal día de ayuno y abstinencia del judaísmo rabínico.