La taquería Don Rey llevó desde Ciudad de México a Acapulco 3 mil tacos, el equivalente a 120 kilos, para alimentar a cerca de 700 afectados por el huracán Otis, que ha dejado sin comida a miles de personas tras su histórico azote hace una semana.
En la fila del improvisado puesto de tacos, había decenas de personas que probaban por primera vez la carne y la tortilla después de comer solo alimentos enlatados, cacahuates o papas fritas desde que Otis tocó tierra el 25 de octubre como el ciclón más potente en la historia de México.
“El huracán nos dejó sin casa, sin bienes materiales, pero la rapiña nos dejó sin comida, no tenemos qué comer, no hay nada que comprar. Desde el 25 he comido huevos y atún”, comentó a EFE María, habitante de Acapulco, la ciudad más impactada por el fenómeno.
Enrique Juárez llegó con un equipo de 10 personas que hacen “taquizas” en Ciudad de México, donde les nació la idea de ayudar al “ver en las noticias cómo este bello puerto está devastado y ver a la gente que la está pasando mal”.
“Muy triste ver todo destruido, ver los hoteles grandes hechos pedazos, las plazas igual, la verdad es muy triste ver esto porque hemos venido varias veces y llega uno con otra imagen, y ahorita ver así esto, todo destruido, la verdad está muy feo”, expuso el taquero.
A más de una semana del azote de Otis, que tocó tierra como categoría 5 en Guerrero, donde ha dejado 46 muertos y rompió el récord de intensificación de un ciclón en México, continúan las labores de rescate en Acapulco.
La Secretaría de Bienestar del Gobierno ha estimado 222 mil viviendas afectadas, de las que cerca de 50 mil serían pérdida total.
Por ello, las personas llegan “muy agradecidas” al puesto de la taquería Don Rey.
“Me han dicho personas que no habían comido carne, tacos, probado tortillas en unos días, desde que empezó esto, entonces la verdad es difícil, y nos alegra poner nuestro granito de arena para que puedan llevarse a la boca un taco caliente”, mencionó Juárez.
El Gobierno de México anunció este miércoles 61 mil 313 millones de pesos (más de 3 mil 400 millones de dólares) para las reparaciones y apoyos sociales en Guerrero, mientras que la agencia Fitch calculó en 16 mil millones de dólares las pérdidas catastróficas, tanto económicas como aseguradas.
El presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha prometido “poner de pie” a Acapulco para Navidad, al descartar el pronóstico de las cámaras empresariales, que anticipan un plazo de dos años para la reconstrucción.
Pero mientras la recuperación llega, pobladores como Osiris Castañeda dependen de la solidaridad de su familia, amigos y buenos samaritanos como los taqueros capitalinos.
“Mi hija, que es fanática de los tacos, créame que cuando los vio su corazoncito, su carita, se le alegró muchísimo”, narró.