Todos los hospitales del norte de la Franja de Gaza, donde está la parte más densa de la infraestructura sanitaria de este enclave, han dejado de funcionar, con la única excepción del hospital Al Ahli, donde hay 500 pacientes y puede seguir recibiendo a algunos más, a pesar de las dificultades.
«Todos los hospitales en la ciudad de Gaza (norte) y en el norte de Gaza están fuera de servicio debido a la falta de electricidad, de suministros médicos, de oxígeno, alimentos y agua, además de los bombardeos y enfrentamientos a los alrededores», afirma la Oficina de Coordinación de Ayuda Humanitaria de la ONU, en su reporte diario sobre el impacto en los civiles de la guerra entre Israel y el grupo islamista Hamás.
La situación del hospital de Al Shifa era la que parecía más grave en los últimos días por tratarse del principal centro hospitalario de Gaza y haber estado recientemente en el centro de enfrentamientos armados y haber sido dañado por bombardeos israelíes.
Según Naciones Unidas, en los dos últimos días, 32 pacientes y tres bebés prematuros murieron en Al Shifa como consecuencia del corte de electricidad y las condiciones extremadamente precarias.
Las últimas informaciones que se han recibido de ese hospital indican que hasta ayer quedaban entre 600 y 650 pacientes hospitalizados, entre 200 y 250 miembros del personal y 1.500 desplazados internos, mientras que 36 bebés en incubadoras y los enfermos que necesitan diálisis estaban en riesgo inminente de morir.
El Ejército israelí ordenó la evacuación de los hospitales del norte de la Franja, pero la Organización Mundial de la Salud declaró que eso equivalía a una sentencia de muerte por el colapso del sistema médico en su conjunto y que los hospitales del sur no tenían en absoluto capacidad -y siguen sin tenerla- para recibir a los pacientes evacuados.
Al mismo tiempo, la OCHA señaló que Israel sigue «llamando y ejerciendo presión» en los residentes del norte para que se desplacen al sur, algo que han hecho unos 200.000 en la última semana, lo que eleva a más de 1,7 millones los desplazados internos en Gaza.