Por Miguel Ángel Martínez Salazar.
En el contexto de las elecciones en Estados Unidos, el embajador estadounidense Ken Salazar ha expresado su preocupación por la recurrente tendencia de algunos políticos en utilizar a México y los mexicanos como «piñata» con fines electorales. Este término, que evoca la idea de ser objeto de golpes y abusos, refleja la indignación ante la instrumentalización de la relación bilateral entre ambos países con propósitos políticos partidistas.
Salazar, en su papel diplomático, ha hecho un llamado enérgico a evitar que México sea objeto de manipulación en el contexto de las elecciones estadounidenses. Ha destacado la necesidad de preservar una relación constructiva y respetuosa entre ambas naciones, basada en la cooperación mutua y el beneficio compartido.
La democracia en Estados Unidos es un proceso vigoroso y apasionado, donde diversos temas, incluyendo la relación con México, pueden ser utilizados para movilizar a los votantes. Sin embargo, Salazar subraya que el uso de México como un «chivo expiatorio» electoral es injusto y contraproducente para ambas partes.
Es fundamental comprender que México y los mexicanos son actores clave en la escena internacional, con una identidad cultural rica y una contribución significativa a la economía global. Por lo tanto, utilizarlos como herramientas políticas desvirtúa la verdadera naturaleza de la relación bilateral y puede tener repercusiones negativas en la estabilidad y la cooperación entre ambos países.
El embajador Salazar también ha destacado la importancia de abordar los temas fundamentales que afectan a ambas naciones de manera colaborativa y constructiva. Entre estos temas se incluyen la seguridad fronteriza, el comercio, la migración y el medio ambiente. Solo a través de un diálogo abierto y un compromiso mutuo se pueden encontrar soluciones duraderas y beneficiosas para ambas partes.
En este sentido, es esencial que los políticos en Estados Unidos reconozcan la importancia de una relación sólida y respetuosa con México, más allá de los ciclos electorales. La estabilidad y la prosperidad de la región de Norteamérica dependen en gran medida de la cooperación y la colaboración entre ambos países.
Por otro lado, en México, líderes como Claudia Sheinbaum han instado a los aspirantes a la presidencia estadounidense a abstenerse de utilizar a México y su población como piezas de ajedrez político. Esta postura refleja la necesidad de preservar la soberanía y la dignidad del pueblo mexicano en el ámbito internacional.
En conclusión, evitar que México sea utilizado como «piñata» en las elecciones de EE.UU. requiere un compromiso firme por parte de los líderes políticos en ambos lados de la frontera. Solo a través del respeto mutuo, la cooperación y la comprensión se puede construir una relación bilateral sólida y duradera.
