El juez séptimo de Distrito (con sede en Reynosa) Juan Fernando Alvarado López fue formalmente acusado ante el Consejo de la Judicatura del Poder Judicial de la Federación por actuar ilegalmente y con dolo en los juicios de amparo promovidos por Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
En ambos casos el representante de morena ante el Instituto Nacional Electoral (INE), Sergio Carlos Gutiérrez Luna –quien presentó la denuncia–, dice que ese juez incurrió en faltas administrativas graves transgrediendo las normas del procedimiento.
Esto podría derivar en un juicio contra el enjuiciador, ya que está harto comprobado que durante su estancia en la ciudad fronteriza le proporciona cualquier cantidad de amparos al ex gobernador y su familia, lo cual indica, por supuesto, que el juez está a su servicio.
Gutiérrez Luna ha dejado en claro que Francisco Javier está impedido para ser candidato a diputado federal plurinominal, pues las sentencias del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación son definitivas, como inatacables.
Además, “una suspensión de un juez de Distrito no puede revocar una sentencia del Tribunal Electoral (federal)” y porque las suspensiones de los jueces de Distrito son impugnables,
De ahí, su reflexión: “El amparo, es improcedente en materia electoral, por lo que, además, en todo caso, el INE debe impugnar esa decisión para que el juez tenga un castigo”.
Hace días, en este mismo espacio, le comenté que: el juez séptimo de Distrito Juan Fernando Alvarado López, le ha otorgado a García Cabeza de Vaca cuatro suspensiones relacionadas con su registro –como candidato a diputado federal plurinominal–, invadiendo la competencia del TEPJF, que, por ley, es la única instancia para resolver los asuntos en materia electoral.
Es evidente, entonces, que ese juez ha cometido delitos graves contra la administración de justicia.
Y, por esto, amerita ser llevado a juicio político.
¿Listado balín?
A estas alturas del proceso electoral concurrente los siete partidos políticos han definido casi todas las candidaturas al senado de la República, cámara de diputados, congresos estatales y ayuntamientos.
Digo casi, porque en varias entidades aún falta la resolución de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para dar respuesta a las impugnaciones presentadas por quienes están inconformes al sentir violados sus derechos político-partidistas.
Como ocurre aquí, en Tamaulipas, con el rol de aspirantes albicelestes por la vía plurinominal a la LXVI legislatura del congreso estatal en principio impugnado ante el Tribunal Electoral estatal que, por cierto, ordenó reponer el proceso selectivo al Partido Acción Nacional (PAN).
La directiva de ese membrete, en respuesta, acudió a la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación –Monterrey es su sede–, logrando que ésta reconociera la lista original.
Sin embargo, el autor de esta impugnación se inconformó ante la Sala Superior del TEPJF, pero el cuerpo colegiado, a la fecha, no ha resuelto en consecuencia.
En caso de apegarse a derecho los magistrados revocarían el acuerdo de la Sala Regional y tendría que reponerse el proceso selectivo del partido controlado por el grupo de Francisco Javier García Cabeza de Vaca, dando oportunidad a militantes no identificados con éste o liberados de su ‘control’ para ser incluidos o, en su caso, reubicados en el listado.
Esta semana, quizá, habría una definición que privilegie la democracia partidista.
¿Distritos definidos?
En los distritos locales XIV y XV (con cabecera en Ciudad Victoria) la gente mantiene alta empatía con los candidatos de ‘Fuerza y corazón por México’ (Alejandra Cárdenas Castillejos y Miguel Mansur Pedraza).
No así con el abanderado a la alcaldía ni con su par a diputada federal por el V distrito, Arlette A. Marcos Ruiz, a quien apenas pocos ubican; pero sí con el candidato a senador Arturo Núñez Ruiz. Sólo a él, pues su pareja, en la fórmula, aquí no pinta.
Por la coalición ‘Juntos seguimos haciendo historia’, innegable es que el candidato de morena a la alcaldía (Eduardo Abraham Gattás Báez) goza de un alto rating, como el abanderado aliancista al Senado Eugenio Javier Hernández Flores.
Los otros candidatos a la cámara alta ni pintan como tampoco quienes pretenden ser diputados locales y federal, por la alianza morena-PT-PVEM.
En el caso quienes representan a MC, las cosas están peores.
¿Usted los ubica?
Yo, tampoco.
¡Vaya, tan disímbolo escenario ‘competitivo’!
Cicuta
Conforme avanza el proceso electoral, es más notoria la indefinición del voto.
En Tamaulipas existen 2 millones 848 mil 971 electores, según la Lista Nominal; pero está previsto que sólo participarían poco más de la mitad.
Habrá, entonces, votos por convicción, de castigo, en agradecimiento a los apoyos recibidos; y por coacción…
¿Cuáles pesarán más?
