Alerta de alto mando israelí hacia liderazgo persa
El secretario de Seguridad Nacional israelí, Israel Katz, lanzó una advertencia contundente al guía supremo de Irán, Ali Jamenei, exigiendo que detenga las acciones hostiles contra áreas bajo jurisdicción israelí. Durante una reunión de análisis con el comandante en jefe de las fuerzas armadas, Eyal Zamir, y otros representantes del gobierno, el funcionario manifestó que «haría bien en recordar el destino del tirano en la nación vecina», haciendo alusión al exjefe de estado iraquí Sadam Hussein, quien fue ajusticiado en 2006.
El jerarca militar afirmó que «no debe persistir en cometer actos de agresión y lanzar proyectiles contra civiles en territorio israelí. Sería conveniente que recuerde lo sucedido con el gobernante de la nación adyacente a Irán que eligió el mismo camino contra la nación judía», indicó Katz durante un encuentro de alto nivel.
Recomendaciones a población civil en zona de conflicto
El responsable de la defensa nacional mencionó que continuarán los operativos contra la capital persa, mencionando específicamente el ataque aéreo del día anterior sobre las instalaciones de la televisión estatal iraní, que resultó en tres fallecidos. «Exhorto a los habitantes de Teherán a abandonar esas zonas siguiendo las indicaciones del vocero militar traducidas al idioma local, para salvaguardar su integridad», señaló el ministro.
Dedicó posteriormente un mensaje directo a los ciudadanos del país persa: «Eviten colocarse en situación de riesgo y no sirvan como escudos humanos para un régimen que los explota para perpetuar su existencia».
Posiciones oficiales ante posibles escenarios
En una conferencia virtual realizada el día anterior, consultado sobre la probabilidad de que las fuerzas israelíes neutralicen al líder iraní, el primer ministro del estado judío, Benjamín Netanyahu, declaró: «Llevaremos a cabo cualquier medida que se considere indispensable». Mientras tanto, se recordó que el antiguo presidente del Iraq fue condenado a muerte mediante ahorcamiento el 30 de diciembre de 2006 después de ser localizado por tropas norteamericanas en 2003 durante la ocupación estadounidense del territorio.
