Por José Ángel Solorio Martínez.
Nunca se podrá ganar un guerra -una contienda, un enfrentamiento, un diferendo- si no se enfoca la fuerza, en contra del auténtico adversario, o enemigo, según sea el caso. Del verdadero contendiente. El caso de la divergencia entre el SNTE y GOBTAM, es paradigmático; es ejemplar para no incurrir en los mismos errores: segmentos de la IV T, han perdido el objetivo; consideran como enemigo mortal a la Sección XXX, -o al menos así se percibe por la embestida desde Comunicación Social, en contra del movimiento magisterial.
Francisco Cuéllar Cardona y sus aliados -entre ellos los Anastasios- perdieron la visión de campo del conflicto: han quemado los puentes de diálogo, de acuerdo con los profesores y sus dirigentes y han tendido la mano a viejos detractores de la IV T. Han exhumado del panteón político, a Naif Hamscho Ibarra, profesor matamorense que compitió contra Arnulfo Rodríguez Treviño por la dirigencia de la Sección XXX…
…apoyado logística y políticamente, por el senador panista. Ismael García Cabeza de Vaca.
Ese trato de Cuéllar Carmona y sus aliados, será difícil desterrarlo de la contestataria mentalidad del magisterio.
Es decir: la secuela de esas actitudes tan erráticas como viscerales, podrían trasminarse transversalmente durante el resto del sexenio.
Los políticamente ingenuos, replicarán:
¿Y eso qué?
La resistencia al diálogo por parte de los actores oficiales; la campaña negra de Cuéllar y sus muchachos; las abiertas amenazas del Secretario de Seguridad Pública contra el plantón de maestros; la estólida intromisión de la dirigente de MORENA en el estado, son agravios que no se atemperan en el corto plazo.
¿Qué postura tomará la Sección XXX en la relevante campaña presidencial del próximo año?
¿Yuriria Iturbe, la líder morenista en la entidad, está abonando para sumar al magisterio al proyecto de la continuidad de la IV T en la región?
¿Quién quedará de pie en la IV T regional, para pedir el voto a los profesores de Tamaulipas?
Los resultados de todas las fallas y todos los enconos entre gobierno y SNTE, seguirán obstaculizando la implementación de convenios para el apoyo del profesorado en los comicios.
Y eso, será responsabilidad no de los maestros -que están en la búsqueda de mejores condiciones de trabajo-; esa obligación, está en manos de quienes ejercen el poder político.
El anuncio de una comisión del CEN del SNTE y otra de la SEP Federal, es un extraordinario anuncio. Se destraba el pleito.
Hasta donde se sabe, ya ambas instancias centrales, tienen en sus escritorios un detallado informe de las peticiones de los educadores; ya hay avances sustanciales.
Un éxito para la Sección XXX.
De hecho, ese anuncio, llevaba otro de mayor impacto: el cese de facto de la secretaria, Lucía Aimé Castillo; Arnulfo, y sus representantes, negociarán directamente con los enviados el pliego petitorio.
Lucía, es un actor obliterado: si se le deja en el cargo, es un problema -perdió su capacidad de interlocución con el SNTE-; si se le cesa, sigue siendo tóxica: vulneraría el principio de autoridad del Ejecutivo estatal.
La Sección XXX, ya ganó.
Aimé, ya se fue.
Al parecer, se marchará en partes.
¿…?
Sí: la indagación que está solicitando la Sección XXX, habrá de desenterrar lo desaseado del manejo de la SET, por parte de los funcionarios de confianza de la aún secretaria. Se irán por el caño, gentes como Cuca Varela, que hicieron de la educación el negocio particular de sus vidas.
El colmillo de Arnulfo, se está imponiendo.
La solución y los pactos, están a la vista.
