De acuerdo a datos estadísticos de Programas Nacionales Hidráulicos y de registros de la Comisión Nacional del Agua ubicaron a los años 1977 y 2011 como de los más secos registrados en México, pero el 2024 no será la excepción.
El país actualmente transita por su frente frío número 31, para el periodo de enero a marzo de 2024 se pronostican una veintena de frentes fríos y escasez de lluvias en el país.
El “calor” aún falta en llegar al país, por un par de meses más y es que aún faltan más de 20 frentes fríos para que termine la temporada invernal y pobladores de la alcaldía Miguel Hidalgo, en la Ciudad de México ya realizaron bloqueos en protesta por falta de agua potable.
Habitantes de las colonias Molino del Rey y Lomas de Virreyes, cerraron la circulación en Fernando Alencastre y Alicama, de la citada demarcación.
Y aun no llega la temporada de estiaje, periodo del año donde los niveles de los ríos y lagunas disminuyen de manera importante, que comprende los meses de marzo a mayo y en varias zonas del país ya registran estragos serios por falta de agua potable por la sequía prolongada que está afectando.
El año 2023 fue de grandes pérdidas y prolongada sequía, al menos en el sector agrícola, fueron muy cuantiosas, al punto que en algunos estados de la república tuvieron un año catastrófico para la agricultura.
De acuerdo al Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, de enero a septiembre del 2023, se registraron 502 mil 550.14 hectáreas siniestradas en el campo mexicano.
Las hectáreas fueron sembradas, sin embargo por diferentes motivos, no se desarrollaron, lo que generó grandes pérdidas económicas al sector agrícola.
Actualmente la sequía afecta al 65.3 por ciento de los municipios del país, de acuerdo al reporte correspondiente a la primera quincena del 2024 del Monitor de Sequía en México.
El Monitor de Sequía en su reporte de fecha 21 de enero del año en curso, cita que gran parte de México se observaron lluvias por debajo de lo normal, favoreciendo el incremento de áreas con sequía.
La sequía excepcional (D4= sequía excepcional) aumentó en Sonora, Chihuahua, Durango y San Luis Potosí, y surgió en porciones de Sinaloa y Guanajuato.
Mientras que la sequía severa a extrema (D2=sequía severa a D3=sequía extrema) incrementó principalmente en el centro y occidente del territorio nacional.
Al 15 de enero de 2024, el porcentaje de áreas con sequía de moderada a excepcional (D1 a D4) a nivel nacional fue de 61.59 por ciento, registrándose un 6.75 por ciento mayor que lo cuantificado a finales del año 2023.
El reporte registró 1,613 municipios con sequía en el país, 664 municipios anormalmente seco (D0) y 194 municipios sin afectación de un total de dos mil 471 municipios.
En el caso de sequía moderada 531 municipios están en esta categoría, mientras que en el caso de sequía severa se encuentran 551 municipios; en sequía extrema están 331 municipios y en sequía excepcional se ubican 136 municipios del país.
México está conformado por 2,469 municipios y demarcaciones territoriales que conforman los 31 estados y la Ciudad de México, por lo que al 21 de enero del presente, 1,613 municipios registran algún grado de sequía.
En el año 2023, el 6 por ciento del territorio mexicano presentó algún grado de sequía; En la vertiente del Golfo hacia la península de Yucatán y las costas del Pacífico se registró intensidades moderadas a severas.
En el 2011 el país registró el 87 por ciento con sequía, y para el 2024 la historia se puede volver a repetir.
Las causas de la sequía se derivan en su mayoría en lo general a alteraciones de los patrones de circulación atmosférica, que a su vez fueron ocasionados por el desigual calentamiento de la corteza terrestre y de las masas de agua, manifestados en fenómenos como El Niño.
De acuerdo al Monitor de Sequía en México, el país vive una de sus peores crisis de agua, pues más de la mitad de sus municipios están realizando acciones diversas para racionar el vital líquido.
Los estados más afectados por la sequía que se ha registrada en los últimos años, la cual va deintensidad severa a extrema son: Sonora, Chihuahua, Sinaloa, Durango, Nayarit, Zacatecas, Aguascalientes, San Luis Potosí, Jalisco, Guanajuato, Querétaro, Michoacán, Hidalgo, Tamaulipas, Estado de México, Morelos y Guerrero.
En México existen siete climas predominantes, Cálido Subhúmedo, Seco y Semiseco, Muy Seco o Seco Desértico; con menor superficie los climas: Cálido Húmedo, Templado subhúmedo, Templado Húmedo y Frío con la mínima superficie.
Destacan con mayor extensión los climas: secos, semisecos, muy secos y desérticos son los más abundantes, con un porcentaje total de 53.11 por ciento de la superficie total del país.
Tamaulipas y la Sequía..
Tamaulipas registra el 38 por ciento de su territorio es semi seco o seco y solo 1.58 por ciento es húmedo, dejando el resto al clima subhúmedo, con un periodo de sequías de varios meses y una precipitación anual promedio de 780 litros por metro cuadrado (INEGI, 2021).
No obstante, el estado experimenta la peor sequía en muchas décadas, por lo que las presas, el sistema lagunario y acuíferos que abastece la entidad se encuentra en niveles críticos a mínimos.
Al ser Tamaulipas un estado con trayectoria histórica de sequías, se podría esperar que la situación, lejos de mejorar, empeore aún más para este 2024.
El escenario empeora en ciudades como en Ciudad Victoria, que registra sus acuíferos como “La Peñita” sobreexplotados.
El Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), en su reporte al 15 de enero del 2024, registra Tamaulipas 32 municipios con sequía, de los cuales 23 presentan sequía extrema, 6 sequía severa y 3 sequía moderada.
Asimismo se registra 11 municipios anormalmente secos. El 83 por cierto de los municipios de Tamaulipas sufren algún tipo de sequía.
El reporte señala que Anormalmente seco esta el 26.8 por ciento; en sequía moderada el 18.6 por ciento; sequía severa el 22.3 por ciento y sequía extrema el 28.7 por ciento de los municipios.
La principal razón de los problemas de sequía en el país radica en el hecho de que una gran parte de nuestro territorio es zona árida, es decir, tiene problemas de sequía de manera natural.
Esto se debe a nuestros tipos de climas predominantes en el norte, sur y centro del estado, donde el clima es muy variante, y las temperaturas van de los 35 hasta los 50 grados centígrados.
Caso concreto esta Nuevo Laredo, que durante la pasada canícula del 2023, presentó temperaturas que superaron los 45 grados Celsius, la sensación térmica llegó hasta los 50 grados, temperaturas que no se registraban tan altas como las que tuvieron lugar en el año 1998, cuando la mayor temperatura registrada fue de 42 grados.
El país está atravesando por una crisis severa de agua y aún no da inicio la temporada de estiaje, donde la demanda del vital líquido es mayor.
Acciones y estrategias.
La ciudadanía debe de tomar conciencia en cuidar el agua, respetar y cumplir las campañas que realicen las autoridades, reportar fugas, administrar el agua de la mejor manera posible.
Las autoridades gubernamentales requieren trabajar con programas efectivos y oportunos de captación de agua de lluvia, una adecuada distribución de los recursos hídricos, políticas públicas de regeneración de bosques para mejorar la infiltración lenta para la carga de presas, rediseño de los sistemas meteorológicos, hidrológicos y de calidad del agua; instalación de centros regionales de pronóstico, desarrollo de infraestructura para la protección del agua, monitoreo y atención inmediata de fugas de agua, perforación de pozos, difusión del cuidado del agua, e Invertir en tecnologías para reducir el consumo de agua en las industrias agropecuarias, extractivas o manufactureras, instalar mecanismos para reutilizar y reciclar el agua en los hogares, industrias, jardines, cultivos, etc.
En caso de no implementarse planes y programas de recuperación hídrica a largo plazo y de seguir aumentando la población y las industrias de todo tipo, la demanda de agua se incrementará aún más.
México es un país que registra estrés hídrico, lo que significa que existe mayor demanda de agua potable que agua disponible. Por lo que las regiones con alto nivel de estrés hídrico tienen gran escasez de agua.
Se requiere de acciones tendientes a diseñar programas para disminuir los riesgos y atender los efectos de la sequía y aumentar la capacidad del Estado para conducir y regular los fenómenos hidrometeorológicos que afectan a la población, con el fin de transitar de un sistema de protección civil reactivo a uno preventivo.
Y Usted que Opina..?
Nos vemos en la próxima…