La candidata presidencial del PRIAN, Xóchitl Gálvez, ha regalado municiones demoledoras a MORENA y ni los candidatos, ni el partido, ni sus dirigentes –y mucho menos el delegado del CEN–, han sabido aprovecharlas. Como se dice en el argot del juego de damas: la han dejado pasar por boba. ¿Acaso no es un obús gratuito proporcionado por Miss Gelatinas la declaración de desaparecer la refinería de ciudad Madero?
¿No es una magnífica oportunidad sin costo, esa nauseabunda narrativa de la señora Gálvez?
¿No es la oportunidad de deslindarse y confrontar con el discurso neoliberal de acabar con los bienes públicos desde los planteamientos anti-privatizadores de la IV T?
Oro molido, lo dicho por la panista, para los candidatos de MORENA en Tamaulipas; sobre todo, porque es un estado que ha sustentado su desarrollo y crecimiento con los aportes de la Industria petrolera; es un tesoro, porque el sur del estado, en parte gira y ha girado por décadas de la extracción, refinación y comercialización de hidrocarburos.
De otra manera: es totalmente irracional, suponer que ganará simpatizantes y votos con ese discurso inapropiadamente estúpido.
Y es igualmente absurdo, creer que esa proclama ayudará a sus compañeros de partido a ganar diputaciones, alcaldías y senadurías.
Sólo a un inconsciente, o un desquiciado, puede ocurrírsele hacer compromisos de campaña sobre el aniquilamiento de factorías que generan y han generado -por más de un siglo- bienestar en la zona para miles de tamaulipecos, veracruzanos y potosinos.
Tan desquiciadas, tan fuera de base han sido esas ideas, que hasta los panistas se han deslindado de lo dicho por Xóchitl.
La grande mayoría de los candidatos de MORENA, están muy lejos de comprender el proyecto central de MORENA: su lucha frontal al neoliberalismo. Esa importante porción del lopezobradorismo regional, no entiende ni jota de su papel en el proceso electoral que nos ocupa.
Justo por eso, esas criaturas que andan en busca del voto de los tamaulipecos, han sido incapaces de llevar agua a su molino con la exteriorización del sueño de Xóchitl de acabar con la refinería del sur tamaulipeco.
¿Qué está ocurriendo en estos momentos en la mentalidad del electorado del sur del estado ante la posible realidad de que un día la refinería ya no esté en el lugar en donde está?
La campaña de terror, se le está revirtiendo al panismo conservador. La esencia de su narrativa, estuvo centrada en la segura aniquilación de la planta productiva por las decisiones socio-políticas equivocadas del presidente Andrés Manuel López Obrador. Y ahora, los azules enseñan sus cartas quitándose la máscara: desean acabar con los centros de trabajo de miles de familias que reciben ingreso directa o indirectamente de esa benefactora mole de acero.
Ingratos los de MORENA: ni siquiera, invitaron a un cursito de un fin de semana a sus candidatos.
Ahora, están pagado la omisión de una estrategia razonada para postular candidatos potentes y leales a la IV T.
¿Qué han dicho las creaturas Olga Sosa y José Ramón Gómez, candidatos guindos al Senado?
Uno y otra, han centrado su estrategia electoral, publicado fotos con sus presuntos simpatizantes.
O sea: la frivolidad, ante todo.
¿Y la necesaria narrativa anti-neoliberal para diferenciarse del PAN?
Aquella parejita, vive en una surrealista contradicción: su panismo les impide ser anti-neoliberales y su ingenuidad –en el rancho les dicen de otra forma–, les impide aplastar a los neoliberales…