En Bogotá, la institución eclesiástica ha actuado históricamente como mediadora en conflictos nacionales. En esta ocasión, el cardenal Luis José Rueda organizó una reunión entre el presidente Gustavo Petro y el líder conservador Efraín Cepeda, junto con representantes de organismos estatales y judiciales que han tenido fricciones con el Ejecutivo.
Comunicado conjunto por la unidad nacional
El encuentro culminó con un documento donde participantes comprometidos firmaron un acuerdo que insta a la población a promover la armonía y rechazar la violencia.
«En un contexto mundial, nacional y local, de profundas tensiones, contradicciones y transformaciones, como ciudadanos, servidores y representantes de las instituciones del Estado colombiano, nos comprometemos juntos e invitamos a todo el país a escucharnos, valorarnos y respetarnos en hermandad; a desarmar y armonizar la palabra, y a rechazar todo tipo de violencia»
, expresan en el texto.
Antecedentes de protestas y acusaciones
El almuerzo conciliador se desarrolló un día después de las movilizaciones denominadas Marcha del Silencio, donde líderes de centro y derecha manifestaron descontento con el discurso presidencial. Sectores opositores han relacionado el clima político con el atentado sufrido por Miguel Uribe Turbay, precandidato del partido Centro Democrático, quien permanece en condición crítica.
Enfrentamiento retórico entre líderes políticos
Las tensiones entre Petro y Cepeda han escalado a través de declaraciones contundentes. El mandatario ha utilizado términos como «HP» y «neoesclavista» hacia el presidente del Senado, mientras que Cepeda ha alertado sobre riesgos para la democracia colombiana. La situación se agravó cuando Petro emitió un decreto para convocar a consulta popular sin el respaldo legislativo requerido.
Presión sobre instituciones judiciales
La Corte Constitucional y el Consejo de Estado analizan las acciones legales presentadas contra el decreto presidencial. El presidente Jorge Enrique Ibáñez de la Corte Constitucional, participante en la reunión, ha manifestado preocupación por el tono divisivo en el ámbito político. Las cortes han mantenido distancia frente a las críticas y convocatorias del Ejecutivo en diversos procesos recientes.
