En un encuentro con más de 1,800 accionistas celebrado en Barcelona, el líder del banco catalán Banco Sabadell, Josep Oliu, reiteró su negativa a las ofertas de adquisición presentadas por BBVA, el segundo banco más grande de España por activos y líder en México. La reunión contó con la presencia de 300 inversionistas en las instalaciones de Sant Cugat del Vallés y más de 1,500 participantes a través de medios virtuales.
Valoración del banco independiente
El presidente destacó que mantener la autonomía del grupo financiero representa un mayor valor para los accionistas. Durante la asamblea, Oliu presentó cálculos que muestran que una inversión de 10,000 euros en 2020 tendría hoy un valor de 94,332 euros, superando ampliamente los 48,000 euros que se obtendrían si hubiera sido invertida en BBVA. En el último año, una inversión similar se habría valorizado en 17,510 euros, de los cuales 16,334 corresponden al precio de las acciones y 1,176 a dividendos.
Argumentos económicos
Según el directivo, la propuesta actual de BBVA presenta una prima negativa del 8%, lo que se traduciría en una disminución de valor cercana a los 1,250 millones de euros para los accionistas de Banco Sabadell. La última oferta, lanzada en mayo de 2024 con un valor de 13,590 millones de dólares, fue revisada por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) española, que consideró «adecuados, suficientes y proporcionados» los compromisos presentados por BBVA.
Proyecciones futuras
El consejero delegado César González-Bueno destacó la «elevada rentabilidad de todos los negocios del Grupo» y afirmó que «Banco Sabadell ha realizado un salto enorme» en términos de rentabilidad. El banco prevé distribuir 1,300 millones de euros a sus accionistas con cargo a los resultados de 2025, manteniendo el mismo dividendo en efectivo por acción que en 2024.
«Si como accionista tenías 10,000 euros invertidos en 2020 cuando el Consejo de Administración rechazó la primera propuesta de fusión de BBVA, hoy esa inversión tiene un valor de 94,332 euros».
«Esto está soportado por un objetivo de rentabilidad RoTE creciente, lo que permite mejorar la retribución al accionista y ha impulsado la evolución de nuestra acción».